Desde hace más de seis generaciones, los viñedos de las Bodegas Cautela han dado alegría y un producto declarado patrimonio esencial de la región a muchas personas. Desde 2014, una increíble bodega de más de 5000 metros cuadrados ha triplicado la producción de vino, apostando por el futuro, por la tecnología y por poner a la venta las mejores variedades de vino de la provincia.