El santuario en honor a la Virgen de Peñarroya se encuentra junto al castillo, en un paisaje lleno de arbustos y matorrales en la cuenca del río Guadiana. En su interior, se encuentra la Virgen, que cuenta con una advocación mariana compartida por los pueblos de Argamasilla de Alba y La Solana.
Asimismo, en la plaza de armas del castillo, se encuentra una pequeña ermita del siglo XIII, cubierta con bóveda de cañón y diminuta hornacina, acompañada de otro templo barroco, que dispone de pinturas murales, un retablo churrigueresco y un precioso camarín.
El paraje que lo rodea es tremendamente bello y, hoy en día, está presente el embalse de Peñarroya, muy cercano el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera.