En las paredes de este yacimiento aparecen unas antiquísimas pinturas agrupadas en un panel con 11 figuras antropomorfas de tipo ancoriforme; se tratan de ídolos oculados (con gran énfasis en la cara y en los ojos) acompañados de varios puntos y barras que se concentran en la parte más occidental de la roca.
La ruta más práctica para llegar al lugar es por la carretera de Solana del Pino a Mestanza, por la que se llega al Puerto de los Rehoyos; allí existe un Mirador, del que sale una senda por lo alto de una cuerda de unos 300 metros. Siguiendo este recorrido se accede fácilmente a las pinturas rupestres del Peñón del Collado del Águila.