La Iglesia Parroquial de San Bartolomé data de 1560, cuando los primeros habitantes del pueblo la edificaron sobre el solar del antiguo castillo árabe utilizando materiales reutilizados, por lo que en muchas de las piedras de sus muros se pueden contemplar cruces y motivos visigodos y medievales. Se trata de una iglesia de planta basílica, tejado de dos aguas, sin torre y rematada por una espadaña con campanario.
Su interior consta de una única nave con dos capillas laterales añadidas posteriormente. En siglos anteriores, los muros alojaron panteones privados de las familias más pudientes (siglo XVI) y pequeños altares para las imágenes de las cofradías, también se conservan en ellos restos de pinturas y frescos medievales.