A 12 kilómetros de Villarrubia de los Ojos de la localidad se encuentra este asombroso y bello santuario, en lo alto de las estribaciones de los Montes de Toledo, dominando el paisaje de la sierra del entorno. Desde allí se puede observar y disfrutar del paisaje de las Tablas de Daimiel.
El santuario está constituido por una ermita integrada en un gran patio alargado de dos plantas con viviendas; dicha ermita es blanca, con tejados a dos aguas y teja curva, formada por una sola nave cubierta con bóveda de cañón. El altar y el trono de la virgen se separan del resto del templo por una verja. Las viviendas que rodean al patio, un espacio fresco empedrado y con pozo, están decoradas con macetas de floridas plantas.
Generalmente, el santuario está abierto todos los días del año mientras haya luz solar. Además, la ermita cuenta con un pequeño museo religioso que puede visitarse los sábados y domingos por la tarde.
Se celebran en sus inmediaciones dos romerías en las que se unen las funciones religiosas y los festejos populares. La primera ocurre el tercer domingo de mayo, mientras que la otra lo hace el lunes de Resurrección.
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