Esta Ermita se encuentra en el ala norte del Santuario de Nuestra Señora de Carrasca, característico por ser el único ejemplo de santuario con plaza de toros, junto con el de Las Virtudes, de la provincia de Ciudad Real. Esta ermita es un espacio rectangular, de una sola nave cubierta en la parte con bóveda de cañón con lunetos. La nave y capilla mayor están separadas por una verja de hierro del siglo XVIII, decorada con formas vegetales, corona, Cruz de Santiago y escudo partido, en alusión a los apellidos Abat, en la parte derecha, y Sandoval, en la izquierda.
La capilla mayor alberga el magnífico retablo barroco, dorado en oro en 1720, en cuya cabecera destaca la emblemática encina o carrasca, con abundantes raíces, haciendo referencia al lugar donde se apareció la virgen según cuenta la leyenda.
El retablo enmarca la hornacina central, con la imagen de la Virgen de la Carrasca. Otro elemento muy apreciado de la ermita es el mural cerámico que hay frente a la entrada del camarín. Representa la aparición de la Virgen de la Carrasca al pastor José Cortés. Según la tradición la virgen exigió al pastor la construcción de una ermita y la celebración de una fiesta en su honor.
Época: Siglo XVIII
Uso: Religioso
Horario de culto
Gratuito
13332, Ciudad Real
La Iglesia reconstruida en 1577, presenta un estilo arquitectónico de transición que contiene principales...