Esta iglesia parroquial de asombroso y amplísimo espacio interior se levanta sobre una gran lonja. Asimismo, dispone de monumentales e impresionantes columnas y nervios de las bóvedas.
Se inicia su construcción a mediados del XVI bajo la dirección de Enrique Egas el Mozo, pero no finaliza hasta 1602, como indica el rosetón de su fachada. Se trata de un templo de planta de salón con tres naves de igual altura cubiertas por bóvedas de crucería. Cuenta con dos portadas barrocas y una torre proyectada en el siglo XVII, pero que no se concluyó.
Además, acoge a la patrona de Almagro, la Virgen de las Nieves, durante los meses de invierno.