Esta muralla, la cual rodea totalmente este municipio, fue construida en la mitad del siglo XVIII por los operarios de la mina de Almadén durante la interrupción de la explotación provocada por un incendio. Está construida con mampostería de piedra y argamasa, aunque se emplea el ladrillo en diversos elementos como lienzos, vértices, mechinales y en la cubierta superior original, rematada con un tejadillo a dos aguas sobre una cornisa de dos hiladas.
La muralla contaba con siete puertas, tres de ellas de mayor envergadura que el resto: las puertas oeste, norte y este. La puerta oeste está fabricada con ladrillo y consta de dos jambas y un arco rebajado; se protege con un tejadillo a dos aguas de teja árabe. La puerta norte está realizada con ladrillo y cajas de mampostería en las jambas, y tiene un arco de medio punto de sección longitudinal abocinada. La puerta este también está construida con ladrillo y cajas de mampostería, y tiene un arco rebajado que remata en un frontón de lados curvos.