El Castillejo del Bonete es un santuario solar compuesto por varios túmulos conectados entre sí mediante corredores. Otros corredores tienen forma abocinada (de embudo) y están astronómicamente orientados al solsticio de invierno. Fue utilizado durante el Calcolítico y la Edad del Bronce. Esta zona arqueológica fue declarada como Bien de Interés Cultural en 2014.
Todo el complejo monumental fue edificado sobre una cueva natural que consta de varias galerías. La cueva, que ha permanecido sellada desde la Prehistoria hasta 2003 (momento de su descubrimiento), está acondicionada mediante construcciones diversas además de contar con arte rupestre esquemático. Tanto su interior como los túmulos exteriores han sido empleados de forma recurrente durante más de mil años para enterrar personas, depositar objetos y realizar ritos.