Almodóvar del Campo conserva en su casco urbano casas que reflejan las formas de vida tradicionales, que estaban muy vinculadas al ciclo de las estaciones. Naturalmente, este municipio ofrece la oportunidad de pasear por sus calles y observar sus fachadas, portadas de piedra, escudos de antiguos linajes, etc., ya que este ambiente nos traslada a aquellos tiempos en los que las Ferias y el trasiego comercial de tratantes, pastores trashumantes y caballeros recorrían esas mismas calles. Además, destaca por haber sido uno de los escenarios de la novela corta cervantina Rinconete y Cortadillo, la Venta de la Inés. Actualmente, esta venta se puede visitar.
De hecho, podríamos decir que la “Rinconada de Almodóvar del Campo de la Orden de Calatrava” es quizás la gran desconocida de la provincia de Ciudad Real. Realmente, el patrimonio cultural de esta localidad es envidiable por los personajes históricos y religiosos de gran relevancia que han nacido aquí, por su excelente gastronomía y, sobre todo, por ser una gran parte del Valle de Alcudia. Además, las pedanías que dependen de Almodóvar del Campo son parte de ese patrimonio. Por ejemplo, en La Bienvenida se encuentra el importante Yacimiento Arqueológico de la Bienvenida, además de distintos lugares de interés que podremos encontrar en Fontanosas, Navacerrada, Minas del Horcajo, Retamar, San Benito, Tirteafuera, Valdeazogues, Veredas y Viñuela.
Por otro lado, en la plaza de la localidad podremos encontrar la Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción, que cuenta con un impresionante artesonado mudéjar del siglo XV. En efecto, se considera uno de los mejores ejemplos de arquitectura mudéjar de todo el país. Asimismo, el Ayuntamiento, que se ubica en un edificio del 1928, alberga una interesante colección de cuadros de Palmero, el pintor más ilustre de Almodóvar del Campo.
También destacan la Antigua Ermita de la Trinidad y hoy Archivo Municipal, la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen y la Casa-Convento de La Merced, actual hogar de las monjas jerónimas. Por otro lado, encontraremos distintas ermitas de diversas épocas repartidas por todos los barrios, lo que supone un bello muestrario de arquitectura y religiosidad popular. Todas ellas están abiertas en horario de culto y en algunas festividades religiosas.
Aparte de estos templos, en la calle Corredera perviven escudos y antiguas casas nobiliarias como la Casa-Palacio de los Marqueses de Casa Pacheco, que actualmente es el Centro Cultural “Casa de la Marquesa” o la Casa de San Juan de Ávila, que conserva una cueva-oratorio y reliquias del santo. Esta última se incluye en una singular ruta avilista y de peregrinación guiada que recorre las distintas iglesias de la localidad.
Lógicamente, no se debe olvidar hacer mención al Teatro Municipal, edificado en 1845 siguiendo los gustos de la burguesía local.